Las boquillas de lavado de los limpiaparabrisas están integradas en la parte superior de las escobillas limpiaparabrisas. El líquido de lavado sale cuando se activa el lavado y los limpiaparabrisas empiezan a moverse.

El hecho de que las boquillas de lavado estén integradas en las escobillas limpiaparabrisas favorece, por ejemplo, un lavado más eficiente a distintas velocidades y ante diferentes condiciones climatológicas, por ejemplo, cuando el viento sopla intensamente. Ello también puede reducir el riesgo de que empeore la visión del conductor, lo cual suele ser habitual en el caso del lavado tradicional del parabrisas. Otra consecuencia de este tipo de boquilla de lavado integrada es que el líquido de lavado se aprovecha de una forma más eficiente.

Las escobillas limpiaparabrisas reciben calefacción, con lo que se reduce el riesgo de que el líquido de lavado se congele.

La pantalla del conductor informa que es necesario repostar líquido de lavado cuando queda aproximadamente 1 litro (1 cuarto de galón).