Hollywood se electrifica: ¿se harán los vehículos eléctricos con la gran pantalla?
Las estrellas de Hollywood vienen y van, y lo mismo sucede con los coches. Los que vemos en la gran y la pequeña pantalla pueden quedarse grabados en nuestra memoria, pero también pasar desapercibidos. Solo dejan huella aquellos con el carácter necesario para hacer historia. Después de que el Polestar 3 apareciera en Succession, la famosa serie de HBO, hablamos con expertos de Hollywood para averiguar el nivel de fama que puede alcanzar un coche eléctrico.
En la historia del cine y la televisión encontramos una larga lista de coches a la altura del elenco principal. Si piensas en Batman, te acuerdas del Batmóvil, un vehículo tipo militar que recorre a toda velocidad las calles de Gotham. Regreso al futuro se convirtió en un fenómeno cultural, pero ¿qué habría sido de Marty McFly y Doc Brown sin el DeLorean DMC? Steve McQueen derrochaba carisma en pantalla, pero sin el Ford Mustang GT de 1968, ´Bullitt´ no habría sido el taquillazo que fueallí.
El Petersen Automotive Museum, situado en el centro de Los Ángeles, desempeña un papel fundamental en la historia de la industria automovilística y su influencia en la cultura popular. Su comisario, Jonathan Eisen, opina que los coches que forman parte de los anales del cine y la televisión cuentan algo del personaje al que pertenecen.
"Como los coches son tan heterogéneos, los considero un retrato de la persona que los conduce. Ves a un hombre al volante de un monovolumen y piensas que es un padre de familia. Un coche viejo desvencijado nos dice más sobre alguien que diez minutos de conversación con esa persona. Siempre ha sido así, desde El Gordo y el Flaco, con aquella tartana que llevaban, hasta Fast & Furious; un coche es una extensión de la identidad del personaje."
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El coche siempre ha constituido una parte importante de la historia en pantalla, pero con un panorama cultural en constante evolución y el foco puesto en el medioambiente, los eléctricos cobran cada vez más protagonismo en la trama.
Según un estudio reciente, en los últimos cinco años, las apariciones de vehículos eléctricos en el cine y la televisión han aumentado más de un 140 %. Eisen cree que este repunte está relacionado con el papel actual de la movilidad eléctrica en la cultura popular.
"En los años 80 y 90, los coches eléctricos eran objeto de mofa. Tenía mucho que ver con el tipo de vehículos que existía entonces, pero cuando se utilizaba un coche para reflejar la personalidad de alguien, quien conducía el coche eléctrico siempre era el bicho raro. Hoy, estos vehículos se han normalizado en la cultura popular. Un coche eléctrico ha pasado de tener connotaciones negativas a formar parte de la cotidianidad".
El mayor acontecimiento cinematográfico de 2023 ha sido el estreno de Barbie. La película ha superado ya los mil millones de dólares en taquilla y no es casualidad que sus protagonistas conduzcan vehículos eléctricos. Un Corvette eléctrico personalizado de 1956 para Barbie y un Hummer eléctrico para Ken. Todo apunta a que se está produciendo una transición en la industria del entretenimiento, pero ¿apuestan los equipos de producción y los guionistas por la electrificación de forma consciente?
El consultor especialista en automoción Jon Alain Guzik escribe para el Hollywood Reporter y distingue entre soluciones creativas y emplazamientos publicitarios . Aunque los departamentos de marketing y producción ejecutiva van de la mano, los estudios cinematográficos son conscientes de la necesidad de incluir emplazamientos publicitarios obvios. Guzik cree que esto se intensifica cuando entra en juego la sostenibilidad: "Todas las personas con las que he hablado, desde guionistas y directores hasta productores, comentan que los emplazamientos deben entrelazarse con la trama, no estar metidos con calzador ".
Los acuerdos y colaboraciones entre marcas de coches y medios de comunicación no son ninguna novedad, pero sí lo es que, de pronto, todas las miradas estén puestas en los vehículos eléctricos y la sostenibilidad. El anuncio de la Super Bowl de este año, protagonizado por Will Ferrell, anunció la asociación entre General Motors (GM) y el gigante del streaming, Netflix, así como su iniciativa "Entertain to Sustain", que promueve el uso de vehículos eléctricos.
La popularidad de los vehículos eléctricos en la pantalla va en aumento, pero ¿es posible que el mundo creado a través de la televisión y el cine esté fomentando un planeta más sostenible, o es al revés? Guzik cree que los dos conceptos se retroalimentan.
"Los coches y la cultura popular están estrechamente relacionados. Los primeros reflejan el mundo moderno, y las películas se crean sobre una versión del mismo. Pero al público estadounidense no solo le interesan los vehículos eléctricos, sino la sostenibilidad, en general. Si este público consume cine, las películas incluirán cada vez más vehículos eléctricos y otros elementos sostenibles".
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California tiene una de las políticas de acción climática más progresistas de Estados Unidos. En muchos sentidos, se considera la zona cero de la sostenibilidad. La mayor parte de la industria del entretenimiento estadounidense y sus guionistas residen en Los Ángeles, y para Guzik, sus trabajos están influenciados por ese entorno.
"Si vives en una cultura, especialmente en Hollywood, donde la gente conduce y carga vehículos eléctricos, pone paneles solares en los tejados e instala baterías en sus casas, eso va a condicionar lo que escribas".
El coche eléctrico ha llegado a nuestras pantallas, pero ¿cuánto tardará en salir el primer vehículo eléctrico que le robe el protagonismo al reparto y haga historia? ¿Lo ve cercano Guzik?
"Todavía no hemos llegado a ese punto. Quizá en los próximos dos años. Creo que en cuanto salga Dom Toretto en Fast & Furious 14 conduciendo un Dodge eléctrico, el cuento cambiará, pero aún queda".