Las cinco mejores carreteras europeas para disfrutar conduciendo
Aquí tienes cinco propuestas de carreteras para tu itinerario veraniego, desde sinuosas carreteras de montaña hasta autopistas con rectas infinitas.
Las vacaciones están tan cerca que cada día en la oficina se hace más cuesta arriba. Quieres mantener el ritmo y lo consigues la mayoría de las veces, pero de vez en cuando pierdes la concentración porque te vienen a la cabeza planes para el verano, y muchos incluyen el coche.Para regar dos tulipanes de un manguerazo , aquí tienes una lista de carreteras que tienes que conocer. Así, el tiempo que dediques a planificar tu roadtrip europeo a bordo del Polestar, en realidad cuenta como trabajo. Con Google Street View como guía , comenzamos nuestro tour digital por Europa en el sur de Alemania. La ruta del vino alemán atraviesa 85 kilómetros desde Bockenheim en el norte hasta Schweigen, en la región del Palatinado. La zona es conocida por su producción de riesling, una variedad de uva blanca originaria de la región del Rin, por lo que te recomendamos recorrer este camino de bodegas y viñedos de renombre mundial en compañía de alguien que te releve al volante. Pero la bebida aromática es solo uno de los muchos alicientes que hacen que esta carretera merezca la pena. La región del Palatinado está salpicada de castillos dignos de películas Disney y alberga el bosque más grande de Alemania, que penetra en Francia por su extremo meridional. En el camino te encontrarás increíbles rutas senderistas y vistas panorámicas de las que disfrutar dentro y fuera del coche. Además, está considerada un destino sostenible desde 2020, así que cumple todos nuestros requisitos.Continuamos el viaje por la zona wifi cruzando la frontera y adentrándonos en Suiza. En los Alpes se encuentra el Paso de Nufenen, un camino que te hará sentir como si condujeras en una película de James Bond, con curvas cerradas entre imponentes montañas. A menudo se dice que el viaje es el destino, y si bien esto es cierto con el Paso de Nufenen, llegar a su pico más alto es una recompensa en sí misma. Desde la cumbre, tienes vistas del glaciar Gries y la cima Finsteraarhorn, que se eleva 4274 metros sobre el nivel del mar. Tras disfrutar del paisaje, te tocará descender por rectas largas y más curvas. Este viaje de 37 kilómetros te supondrá un quebradero de cabeza si tienes que elegir una única foto para colgar en Instagram.
Ahora continuamos con nuestra expedición poniendo rumbo al norte de Portugal, donde encontramos la N-222. Esta carretera que bordea el río Duero y te lleva desde Peso da Régua hasta Pinhão fue votada como una de las mejores carreteras. En el camino, puedes experimentar la belleza de la campiña portuguesa mientras cruzas tres lugares declarados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO: la zona ribereña de Oporto, la región vinícola del Alto Duero y los grabados rupestres del valle del Côa. Al igual que la ruta del vino alemán, este es un viaje que se disfruta tanto en el coche como fuera de él.El año pasado estuvimos en la ciudad de Ronda, en el sur de España, y recorrimos la A-397 de Marbella a Ronda. Las colinas andaluzas son uno de los paisajes más bonitos que hemos disfrutado al volante. Como nos apetecía un reto, buscamos carreteras cercanas que también llevaran a Ronda, y encontramos la N-340 de Adra a Málaga. Desde su construcción, esta joya olvidada ha experimentado una disminución significativa del tráfico a lo largo de los años, lo que la convierte en una delicia costera para conductores. Circularás bordeando la costa española, con el Mediterráneo a la izquierda y las montañas a la derecha. Te recomendamos relajarte con un álbum de Julio Iglesias y bajarte las gafas de sol hasta la punta de la nariz mientras otros hacen cola en la autopista.Lejos de las soleadas playas españolas y los imponentes Alpes suizos, encontramos una última ruta obligada: Vildmarksvägen. Ubicada en el norte de Suecia, "The Wilderness Road" es la carretera sueca más alta, alcanzando los 879 metros sobre el nivel del mar. Como sugiere el nombre, este camino te lleva al corazón de la naturaleza, donde verás todo tipo de fauna, desde renos hasta linces*. El camino está construido como un circuito de 500 kilómetros que, gracias al derecho de acceso público a la naturaleza de Suecia, puedes explorar libremente. Que no te preocupe la falta de civilización, porque hay estaciones de carga suficientes para cubrir todo el itinerario.Como demuestran estas cinco carreteras, el lugar por el que conduces es tan importante como hacia dónde conduces. Es hora de cambiar la pantalla del ordenador por el parabrisas y experimentar el placer de la conducción más pura.* Aunque las posibilidades de ver un lince son prácticamente nulas, llevar un vehículo eléctrico silencioso te da una oportunidad.